Desde muy temprana edad, Víctor Baloa ha vivido la música como un compromiso y una pasión que lo conectan con la historia de su familia. Hijo del legendario Porfi Baloa, creador de “Porfi Baloa y sus Adolescentes”, Víctor no solo heredó un apellido de peso, sino también la responsabilidad de mantener el legado musical con excelencia y creatividad.
Inició su carrera a los 9 años en la orquesta “Chikisalsa”, también dirigida por su padre, donde fue cantante principal por seis años, aprendiendo sobre la exigencia y el negocio musical mientras recorría Venezuela y otros países, consolidando ese aprendizaje en escenarios nacionales e internacionales.
En 2008 fundó su propia agrupación, “Víctor Baloa y sus Chamos del Swing”, proyecto con el que logró dos grandes éxitos, “Mi Motivo” y “Maracucha”, antes de regresar en 2015 a la orquesta familiar, esta vez para proyectarse internacionalmente en giras por América y Europa. Víctor amplió su rol en la orquesta siendo cantante, corista y percusionista, además de aportar en grabaciones y producción audiovisual.
A pesar del peso del apellido, Víctor asume con orgullo y compromiso el legado, señalando: “Ser hijo de Porfi Baloa es un gran compromiso que nos obliga a ser exigentes con el producto musical que ofrecemos al público”. Paralelamente, ha desarrollado su carrera como solista, destacando su EP con el sencillo “Dulce Señorita”, cuyo videoclip fue grabado el día de su boda, y “Vivo Enamorado”, grabado durante su luna de miel, conectando profundamente con su audiencia.
Actualmente, continúa cosechando éxitos con su padre y preparando la gira “Live in Miami de Porfi Baloa y sus Adolescentes”, que ha llevado su música a escenarios estadounidenses, reafirmando su lugar en la salsa contemporánea y su compromiso por mantener viva una tradición familiar que trasciende generaciones.
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